EL VERANO ES LA MEJOR ÉPOCA PARA LAS RELACIONES SEXUALES
El verano es la estación del año en la que se tiene mayor
número de relaciones sexuales debido a varios factores: el calor que aumenta
los niveles de testosterona, de serotonina y endorfinas (por tanto, en verano
se liberan estas sustancias de forma natural); la prolongación de las horas de
luz natural, se tienen más relaciones sociales en el exterior, fiestas y
conciertos con la posibilidad de conocer gente nueva; lugares propicios de
verano: playa, piscinas, viajes, etc; el uso de ropa más ligera que sirve de
estímulo visual, se dispone de más tiempo libre, se rompe con la rutina del
resto del año favorecido a veces por la flexibilidad de horarios laborales y
por las vacaciones de verano en sí, con la disminución de responsabilidades que
ello supone, además de tener una actitud positiva a disfrutar de esta época del
año.
Es en esta época del año cuando muchos jóvenes tras acabar
el curso y esperar con ganas el verano, inician en sus vacaciones estivales,
sus primeras relaciones sexuales, a veces consumiendo alcohol lo cual les
desinhibe y les lleva a la desprotección.
Por ello es importante
incidir (y no solo en los jóvenes) en lo importante que es el uso del
preservativo para prevenir no solo embarazos no deseados sino enfermedades de
transmisión sexual y por supuesto que se trate de relaciones sexuales libres y
consentidas.
¿Puede el verano tener efectos negativos en las relaciones sexuales?
Si bien el verano, en general, cuenta con factores que
contribuyen a aumentar el deseo sexual, también puede jugar en contra:
Hay personas que detestan el calor y el sudor actuando el
verano en negativo respecto a sus relaciones sexuales.
En parejas que durante el año han tenido conflictos latentes que se disipaban con las rutinas diarias, en verano, al disponer demás tiempo juntos, puede haber más roces y discusiones que afectan no solo a la
propia dinámica de la relación sino también a su deseo sexual, que se verá
mermado.
Hay parejas que tienen hijos y al acabar el curso escolar
estarán en casa y/o parejas que se juntan en sus vacaciones con otros
familiares, por lo que se quejan de falta de intimidad, factor que dificulta
las relaciones sexuales.
Lo mismo ocurre con parejas que durante el año presentan
dificultades sexuales (bajo deseo sexual, disfunción eréctil u otras) y consideran
que realizando un viaje especial en sus vacaciones estivales aumentarán su
deseo sexual, algo que al comprobar que no se produce les produce gran
frustración al no cumplirse la expectativa de relaciones sexuales
satisfactorias en verano.
¿Existe un momento del día en verano que aumente o disminuya el deseo sexual?
El nivel de deseo sexual es variable para cada persona e
incluso variar aun en la misma persona, y en el que intervienen muchos factores
no solo físicos sino psicológicos, por tanto aunque el verano cuenta con variables
que pueden activar el deseo sexual, no existe un momento del día que contribuya
a aumentar el deseo; dependerá de cada persona y de cada situación (Ejemplo
puede servir como activador del deseo erótico para una pareja una noche de
verano tras una cena romántica al aire libre y para otra una mañana de verano
en la que no hace mucho calor y han descansado bien).
*Dejo aquí el enlace al artículo del periódico, heraldo joven: